El pueblo boliviano, de nuevo, está en la calle defendiendo su revolución que fue arrebatada por un golpe de estado, en octubre del 2019, mediante maniobras de la derecha internacional, instrumentadas por grupos económicos nacionales los colonizados, descendiente de migrantes fascistas europeos, quienes desde siempre se han beneficiado de la marginación y explotación del indígena, dándole trato de seres inferiores. Y que contaron con la traición de las Fuerzas Armadas y de la Policía boliviana; fuerzas que hayan facilitado la instalación de una dictadura cruel y asesina contra el pueblo, en especial contra los indígenas, y que, como toda dictadura, ha desatado una represión bárbara, con persecución implacable a los líderes de la revolución boliviana.
La revolución boliviana se produce por el influjo de la ola revolucionaria que se desato en América Latina, en la primera década de este siglo, a partir de la revolución Bolivariana en Venezuela y el liderazgo del Comandante Eterno, Hugo Chávez Frías, que nos trajo de nuevo al presente el proyecto del Libertador Simón Bolívar, de patria grande continental, independiente, libertaria, soberana, igualitaria, y que despertó de nuevo los anhelos de justicia de los pueblos de América. Pero también por supuesto es consecuencia de más de 200 años de lucha del pueblo boliviano, en particular las maltratadas y oprimidas etnias indígenas.
En el año 1781 se produjeron en Cuzco y el Alto Perú, de forma articulada las rebeliones liderizadas, en Cuzco por Tupac Amaru II, el ultimo Inca, descendiente directo de Tupac Amaru I; en Chayanta Tomas katarí y sus primos Damasco y Nicolás Katari y en la Paz Tupac Katarí, hicieron temblar el virreinato español, pero fueron derrotados por la mayor preparación, que para la guerra, tenía el ejército del Virrey; Tupac Amaru fue capturado después de 17 meses de combate, y fue martirizado, condenado a morir descuartizado, antes debió presenciar la muerte de sus hijos y de su esposa Micaela Bastidas. Esa ejecución genero muchas protestas en todo ese territorio; Tupac Katari y su esposa Bartolina Siso y los otros líderes continuaron las luchas hasta que también fueron, derrotados y ejecutados igualmente con descuartizamiento. La lucha estuvo planteada por los altos impuestos de alcabala que pagaban los indígenas, contra la esclavitud de los que trabajaba la mina y contra las pésimas condiciones de trabajo de la tierra. Tupac Amaru II movilizo 20.000 combatientes entre indígenas y mestizos y el Virreinato 17.000 de los cuales solo 2000 eran blancos realistas, y el resto eran indígenas, lo que revela que falto la unión de todo el pueblo contra sus opresores.
A pesar de la derrota, quedo la demostración de descontento de los indígenas y de los mestizos, quedo, la no resignación a continuar siendo humillados y explotados impunemente y la sentencia de Tupac Katari que volvería hechos millones, como efectivamente ha vuelto una y otra vez, hasta que al fin triunfaron con Evo Morales
En el siglo XIX, entre 1809 y 1825, fueron las luchas por la independencia de América, y en el Alto Perú, hubo un importante movimiento revolucionario, en Charcas y la Paz, que al ser derrotados se convirtieron en guerrillas, ese movimiento de guerrillas, se conoció como las republiquetas, varios caudillos guerreaban en diferentes partes del territorio Altoperuano, entre ellos destaco Juana Zurduy y su esposo Manuel Ascencio Padilla, Chamanes y jefes indígenas de la región con gamonales que controlaban zonas comerciales, suministraban hombres, armas, uniformes y otros recursos para la movilización; indígenas y mestizos conformaron la tropa, los Padillas combatieron férreamente a la dominación española, y en septiembre de 1816 en la batalla de la Laguna, Juana Zurduy fue herida en combate y su esposo fue capturado y ejecutado inmediatamente. La mujer boliviana siempre se ha movilizado y ha luchado junto a los hombres y hoy vemos como los fascistas las atacan en su identidad agrediendo a las polleras para debilitar las protestas.
Después del triunfo de la batalla de Ayacucho comandada por el General Antonio José de Sucre, las guerrillas altoperuanas, apoyaron al ejército de Bolívar, derrotaron los restos del ejército realista en la región, y fundaron a Bolivia el 6 de agosto del 1825.
A Juana Zurduy, el Libertador Simón Bolívar la visito a su casa y le dijo: Esta República, en lugar de hacer referencia a mi apellido debería llevar el de los Padilla” y la ascendió al grado de coronela y dijo: “la patria tendría el honor de contar con el segundo Coronel de sexo femenino” la primera había sido Manuela Sáenz en la batalla de Ayacucho.
Bolívar hizo decretos entregando tierras a los indígenas y eliminando el pago de los tributos, pero la acción redentora de Bolívar y de la Constitución Boliviana de 1826, una Constitución igualitaria redactada por él, género que todos los tronos europeos así como la república esclavista de EEUU, los oligarcas de Bolivia, Perú, Colombia, y los ambiciosos traidores, se unieran contra Bolívar y contra Sucre, atentaron contra la vida de Sucre en Bolivia y finalmente los asesinaron en Colombia, Bolívar después de un magnicidio frustrado en su contra en Bogotá, y el asesinato de Sucre, le aqueja una gran pena moral, se enferma y muere a los pocos meses; sus decretos liberando a los indígenas, fueron derogados, por lo que a los pueblos indígenas les toco continuar la lucha, que siguió y sigue hasta nuestros días.
Y en el siglo XX en Bolivia, con Paz Estenssoro hubo una revolución y con el Che Guevara hubo unas guerrillas y a finales del siglo y comienzo del siglo XXI: las luchas contra la satanización de la coca y la guerra del agua, crearon las condiciones de unidad del pueblo, que impulso un nuevo triunfo esta vez Tupac Katari reaparece como Evo Morales y finalmente el pueblo triunfa en grande, millones de Bolivianos se unieron y por primera vez un indígena es presidente de la república, una verdadera revolución, y el pueblo indígena, unido con Evo, demostraron que su cultura, el Suma Qamaña: Vivir Bien, es mejor modelo de gobierno, un ejercicio amorosos del mismo, con el pueblo para el pueblo, con pulcritud, con sentido de solidaridad y en comunión con la naturaleza.
Un golpe de estado se ha instalado y temporalmente derrotaron de nuevo al pueblo, pero parafraseando a Bolívar en la carta de Jamaica, diremos: “el velo se ha rasgado, ya hemos visto la luz, y se nos quiere volver a las tinieblas; se han roto las cadenas; ya hemos sido libres y nuestros enemigos pretenden de nuevo esclavizarnos. Por lo tanto, Bolivia lucha con despecho; y rara vez la desesperación no ha arrastrado tras de sí la victoria…. porque los sucesos hayan sido parciales y alternados, no debemos desconfiar de la victoria.
Y como dijo Chávez en su mensaje a los pueblos de Suramérica: hay una revolución, hay una revolución en Suramérica, hay una revolución en América latina, es necesario que el mundo lo vea, lo asume y lo acepte, porque es una realidad que no va a cambiar, es una revolución que trasciende lo ideológico, es una revolución geopolítica, es una revolución de los tiempos, es histórica, es moral, tiene raíces muy profundas …
¡Viva Bolívar, Viva Chávez, Viva Tupac Katari, Viva Evo Morales!
Bibliografía.
La Rebelión de Tupac Amaru II- Diana Pérez, revista Memoria N° 24 feb 2012 del Centro Nacional de Historia
La Pasión Patriótica de Juana Zurduy, Roció Castellano, revista memoria N° 17 del 2010; Centro Nacional de Historia.
Rebeliones Coloniales Suramericanas- Carlos Daniel Valcárcel, Editorial Tierra Firme.
Antonio José de Sucre, El Primer Presidente de Bolivia- revista Memoria N° 14 2010, Centro Nacional de Historia