México insiste en que el organismo debe ser sustituido por uno que realmente represente los intereses de América Latina y el Caribe, lo cual no sucede ahora.
Precisamente el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, a través de su canciller Marcelo Ebrard, reiteró este sábado la propuesta de sustituirla por un nuevo organismo regional que suprima el intervencionismo.
Al participar en el segundo día de la Séptima Reunión Plenaria de Senadores del gobernante partido Morena, Ebrard reiteró que la OEA debe desaparecer.
‘Alguien le tiene que mandar un oficio, o algo, a Almagro, pero la OEA no puede seguir siendo un instrumento de intervención’, expresó el secretario de Relaciones Exteriores.
La presidencia pro tempore de México de la Comunidad de Estados Latinoamericanos (Celac) le ha permitido elaborar un pensamiento profundamente a favor de la eliminación inmediata de la OEA por su actuación intervencionista cada vez más creciente y abierta impulsada y protagonizada por Luis Almagro.
Este mes de septiembre se celebrará la VI Cumbre de Jefes de Estado y/o Gobierno de la Celac, en la que se elegirá al nuevo presidente de turno, hasta ahora solicitada solamente por Argentina, y será ocasión propicia para tratar las ideas de López Obrador.
En la proyección de México, aunque Celac es la institución perfecta para lograr un avance hacia la eliminación de esa entidad tan carente de prestigio, al parecer esta no debería ser el sustituto porque dejaría fuera a Estados Unidos, y eso significa no poder considerarlo un interlocutor para tratar los males que la OEA no aborda.
Es decir, no se podría crear una mesa de negociaciones sin la presencia del oponente, por eso México propuso este sábado decirle adiós y dar la bienvenida a otra organización que construyamos en acuerdo con Estados Unidos para el siglo XXI.
El canciller recordó que este objetivo fue planteado por el presidente mexicano durante el encuentro de julio pasado aquí de cancilleres de la comunidad.
Adelantó que en la Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Celac, prevista para el 18 de septiembre en este país, se tiene el objetivo de fijar los siguientes pasos sobre esta propuesta.
Ebrard recordó que López Obrador mantiene ‘un excelente diálogo con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden’, y apuntó que la vicepresidenta Kamala Harris podría facilitar que se llegue a un acuerdo.
El canciller subrayó que México impulsa la unidad de la región latinoamericana por una cuestión de sobrevivencia, tal y como lo demostró la pandemia de la Covid-19.
Si no estamos unidos, no existimos, no le importamos a nadie, no tenemos la fuerza suficiente cada quien, aislado, manifestó.
De hecho, México está demostrando la inutilidad de la OEA, además del daño que provoca, con su ejemplo de propiciar el diálogo político en Venezuela, y anteriormente el asilo al expresidente de Bolivia Evo Morales.
Morales, recordó el titular, fue amenazado de muerte precisamente por instigación de la OEA y concretamente de Almagro, tras el golpe de Estado en esa nación, en noviembre de 2019.
Todo esto le concede una importancia adicional a la VI Cumbre de la Celac, la cual no se reunía al máximo nivel desde el 2017, cuando se realizó su último encuentro cimero en República Dominicana.