“Hubo una guerra, una guerra inclemente contra la República. El imperialismo lanzó todo su poder sobre la Patria de Bolívar. Cínicos, los amos del Valle pidieron misiles contra el pueblo. El imperialismo venía con saña para erradicar el bolivarianismo de Nuestra América.
Para ello la tarea pasaba por desmembrar la República, hacer colapsar a la nación, destruir los lazos que nos definen como país, la cultura, la constitución, los poderes. Aniquilar las formas de vida del pueblo. Lanzaron un todo o nada. Y acá, tras la batalla, está Venezuela.
La guerra desató contradicciones y dialéctica. Contrario a lo que algunos podrían pensar, la batalla no se cuenta en sepia, en melancolía. La revolución venezolana no se dejó morir. Nuestro pueblo no solo resistió, sino que con el liderazgo de su Presidente, desarrolló formas creativas. Formas que impulsan saldos políticos organizativos concretos; y las compuertas de las nuevas alamedas, para el salto cualitativo.
Tras el fallecimiento del Comandante Chávez y la elección del Presidente Maduro, existió una visión orquestada por hacer colapsar a la República. La denominada salida de 2014 pretendía sembrar una guerra civil, que a partir del odio disolviera los elementos que nos cohesionan por encima de cualquier diferencia. El objetivo ulterior, ante un conflicto la intervención extranjera. En el 2015 el denominado decreto Obama, la operación tenaza, buscaban posicionar a nuestro país como una amenaza internacional, debilitar los lazos geopolíticos de cohesión regional y buscar nuevamente una intervención.
Proceso silencioso acompañado de la penetración de violencia paramilitar, del saqueo de la moneda y contrabando de extracción. Al tiempo, disolver la institucionalidad. Poderes paralelos, tribunales paralelos, consejo electoral, banco central paralelo y hasta supuesto presidente y asambleas paralelas.
Hacer sufrir a nuestro pueblo era el objetivo. Conocimos traidores a la Patria, serviles y familias de los apellidos, de gira internacional pidiendo sanciones, invasiones. Afectar las fuentes de generación de ingresos de la República y ahogarla, estrangularla.
Y la dialéctica de la historia es curiosa. El rentismo petrolero que es uno de los objetivos históricos a superar conoció de las formas de organización y nacimiento de una cultura del trabajo. Y siendo un país importador y dependiente, tuvimos que voltearnos a producir a lo interno, a desafiar por vez primera con tanta fuerza, la construcción de una ciencia y tecnología para la liberación productiva. Y la economía del mantenimiento fue indispensable que apareciera. Y ante la intención de hacer morir de hambre a nuestro Pueblo, el Presidente Maduro invento la GMAS, los CLAP y se reprodujo el saldo político organizativo con la consigna de “solo el pueblo salva al pueblo”.
La planificación, vista siempre como un tema de élites, etéreo, se convirtió en elemento de cohesión social, para abrazar en medio de los campos devastados al imaginario del Comandante Chávez, convocado por el Presidente Maduro. Se hizo espacio de militancia política cotidiana. Y en cada barrio se hizo cartografía social, mapas de soluciones y con priorización colectiva, cohesión social y saldos políticos organizativos; convocados por el Presidente Maduro.
Y el 1×10, las Bricomiles, las misiones de nueva generación muestran parte de las claves: la unidad, la resistencia, siempre el espíritu de combate, creativo. No rendirse jamás. Y de repente, mientras los enemigos siguen siempre al acecho, la acumulación de contradicciones y la forma de llevarlas con una paciencia proverbial y sabiduría del Presidente; se asoma el horizonte. Empezamos a crecer por nuestro propio esfuerzo, falta mucho, muchísimo; pero nuestro Pueblo sabe con firmeza y certeza que se ganó el derecho al futuro.
El presente Plan de la Patria, el Plan de la Patria de las 7T, rumbo al 2030, es una construcción colectiva. Viene de los más de 2,5 millones de casos referidos en la plataforma del 1×10.
Se encuentra en las 10 mil comunidades con mapas de soluciones, en las 25 mil comunidades con cartografía social.
Encontró en 65 mil asambleas y 2,5 millones de personas, la caligrafía de Chávez para hacerse Plan de la Patria.
El intento de disolución de la República. La búsqueda a muerte de Bolívar y Chávez para pretender extirparlos, al saberlos fuerza liberadora del Pueblo, incluso más allá de nuestras fronteras.
Los amos del Valle, los acostumbrados a ver a la Patria como una hacienda, y al pueblo como mano de obra y solo detrás de un delantal, pedir invasiones y que sus amos del imperio les regresen el “juguete” que pensaban les pertenecía.
La unidad, como gran aprendizaje y regalo a la historia de El Sistema de Planes del Plan de la Patria, Ley Constitucional de la Nación, tiene un horizonte de largo aliento. Es la transformación definitiva de la formación histórico social, para construir una sociedad justa e igualitaria, solidaria, con el fin supremo de la felicidad de nuestra población. Los planes sexenales, definen los acentos fundamentales de este proceso de transformación.
El Plan de la Patria al 2025, fue ajustado en las elecciones presidenciales del 2018, ante la amenaza inclemente. Ya los intentos de guerra civil, la guerra económica, los intentos de magnicidio, invasiones, medidas coercitivas demandaron un campo de acción fundamental con asiento en el Sistema de Protección del Pueblo, de la economía como la GMAS y los CLAP, el Carnet de la Patria, la Participación Popular y los blindajes de la República ante las agresiones.
De manera inusitada una de las contradicciones más difíciles de enfrentar es el desarrollo de la economía nacional y soberana, una cultura del trabajo ante el rentismo petrolero.
El Plan de la Patria de las 7T es la construcción colectiva de nuestro Pueblo. Es la mirada puesta sobre las vivencias, necesidades y el horizonte histórico. Es ver con sentido crítico y profunda conciencia los aprendizajes de estos años.
l a unidad, como gran aprendizaje y regalo a la historia de Los pueblos del mundo. La unidad y métodos de dirección colectiva, son un elemento de salto cualitativo, profundo y distintivo.
La construcción siempre con el Pueblo. En cualquier adversidad. Con el coraje de saber que estamos construyendo la épica, de un tiempo que apenas comienza” Plan de las 7T