"...quizás el grito de un ciudadano puede advertir la presencia de un peligro encubierto o desconocido".

Simón Bolívar, Discurso de Angostura

Legitimidad de Maduro

No es el Comunicado del Grupo de Lima lo que sorprende, sino lo caricaturesco de su contenido. Nuevamente y de manera irresponsable, pero también muy torpe, estos gobiernos reunidos en Perú violan las normas establecidas en el derecho internacional al pretender intervenir en los asuntos de una Nación soberana como lo es la República Bolivariana de Venezuela.

Inicia y se basa el comunicado calificando de “ilegítimo el periodo presidencial del régimen de Nicolás Maduro (2019-2025) en Venezuela”. En un simple ejercicio de opinión, plagado de ignorancia y sobre todo de malas intenciones y, por supuesto, sin prueba alguna argumentan “…que el proceso electoral llevado a cabo en Venezuela el 20 de mayo de 2018 carece de legitimidad por no haber contado con la participación de todos los actores políticos venezolanos, ni con la presencia de observadores internacionales independientes, ni con las garantías y estándares internacionales necesarios para un proceso libre, justo y transparente.”[1]

Pretendemos en las próximas líneas disminuir los niveles de ignorancia de los gobiernos de Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Guyana, Honduras, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía y también de EEUU que de manera virtual, en videoconferencia participó, coordinó y dirigió esta comedia. Pero sobre todo, queremos desmontar, con pruebas y argumentos, las mentiras que, a la ligera, este grupo de gobernantes pretende posicionar en la opinión pública internacional.

1. Empecemos por el principio, el artículo 230 de nuestra Constitución soberana establece que “El período presidencial es de seis años. El Presidente o Presidenta de la República puede ser reelegido o reelegida, de inmediato y por una sola vez, para un nuevo período.” Es el caso que el Presidente Nicolás Maduro inició su primer período el año 2013, por lo que los 6 años se cumplen en 2018.

Por su parte, el 231 reza: “El candidato elegido o candidata elegida tomará posesión del cargo de Presidente o Presidenta de la República el diez de enero del primer año de su período constitucional, mediante juramento ante la Asamblea Nacional. Si por cualquier motivo sobrevenido el Presidente o Presidenta de la República no pudiese tomar posesión ante la Asamblea Nacional, lo hará ante el Tribunal Supremo de Justicia.”

Claramente se refiere al 10 de enero de 2019, es decir, inmediatamente después de cumplirse los 6 años del período presidencial anterior. Obviamente, y disculpen la redundancia, para que el candidato elegido tome posesión, debió haber sido previamente elegido. Esto ocurrió, de manera democrática y en el marco de la Constitución, el 20 de mayo de 2018. También es obvio, que sin que la Constitución establezca fechas, las elecciones debieron haberse realizado antes de la toma de posesión, es decir, antes del 10 de enero, lo cual ocurrió el 20 de mayo de 2018.

Para que no le quede duda a los gobiernos que se reunieron en Perú, las elecciones del 20 de mayo de 2018 se realizaron ajustadas a lo que establecen los artículos 230 y 231 de la Constitución.

2. Opinan estos gobernantes que la ilegitimidad se debe a que “no participaron todos los actores políticos venezolanos”. Hacemos de su conocimiento que en las elecciones del 20 de mayo de 2018 participaron 16 organizaciones con fines políticos (Partidos Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Movimiento Somos Venezuela (MSV), Tendencias Unificadas para Alcanzar el Movimiento de Acción Revolucionaria Organizada (Tupamaro), Unión Popular Venezolana (UPV), Por la Democracia Social (Podemos), Patria Para Todos (PPT), Organización Renovadora Auténtica (ORA), Movimiento Político Alianza Para El Cambio, (MPAC), Movimiento Electoral del Pueblo (MEP), y Partido Comunista de Venezuela (PCV), Avanzada Progresista (AP), Movimiento Al Socialismo (MAS) y Comité de Organización Político-Electoral Independiente (Copei) Esperanza por el Cambio (Grupo de electores), Unidad Política Popular 89 (UPP89).

Hacemos del conocimiento de los gobiernos cartelizados en Lima que en el marco de los principios democráticos, en Venezuela no es obligatorio que todas las organizaciones con fines políticos participen en los procesos electorales. Estas organizaciones están en su pleno derecho de decidir si participan o no. Justamente porque nuestro sistema es democrático.

Es el caso que si organizaciones como por ejemplo, Acción Democrática (AD), Voluntad Popular (VP) y Primero Justicia (PJ) decidieron no apoyar a ningún candidato, esto, en lo absoluto ilegitima el proceso electoral. No según nuestra Constitución y nuestras leyes.

A propósito del número de organizaciones políticas que participaron en los comicios, preguntamos a estos gobernantes: ¿es que acaso es ilegítimo el gobierno de Donald Trump y el de todos los presidentes estadounidenses por el hecho de que en sus procesos, si acaso participan 4 partidos políticos, a saber, el Republicano, el Demócrata, el Libertario y el Verde? ¿O es que en esos países, cuando no participa alguna organización con fines políticos queda automáticamente ilegitimado el proceso electoral?

3. Las organizaciones con fines políticos que decidieron no apoyar a ningún candidato, se dieron a la tarea, en una actitud antidemocrática e inconstitucional, de promover la abstención. En Venezuela el voto es un derecho, pero no es obligatorio. Quienes de manera libre, aunque influenciados por organizaciones políticas no democráticas, decidieron no acudir a votar están en su pleno derecho, pero en lo absoluto ilegitima el proceso, más aún cuando 9.389.056 decidieron votar y ejercieron democráticamente su derecho al sufragio.

Estados Unidos se caracteriza por ser uno de los países con la más baja participación en elecciones presidenciales del mundo, históricamente vota alrededor de la mitad de la población registrada[2]. Se sugiere a los gobiernos que suscriben el Comunicado de Lima, que en su próximo ejercicio de intento de injerencia y violación de la soberanía de los pueblos, revisen la legitimidad de los presidentes estadounidenses debido a la baja participación electoral registrada en sus procesos electorales.

4. Se postularon 6 candidatos en las elecciones del 20 de mayo de 2018: Nicolás Maduro, Henri Falcón, Javier Bertucci, Reinaldo Quijada, Francisco Visconti Osorio y Luis Alejandro Ratti (los dos últimos decidieron retirarse).

Con 6.248.864, lo que representa el 67,84% de los votos, resultó ganador Nicolás Maduro; le siguieron Henri Falcón con 1.927.958, el 20,93%; Javier Bertucci con 1.015.895, 10,82% y Reinaldo Quijada quien obtuvo 36.246 votos, el 0,39% del total. La diferencia entre Maduro y Falcón fue 46,91 puntos porcentuales. Sin duda quien resultó electo con amplio margen fue Maduro.

Los candidatos que participaron en la contienda reconocieron el triunfo de Nicolás Maduro.

¿Cómo es eso de que entonces, vienen unos gobernantes de países vecinos, voceros del que queda más al norte, y que no tienen ni arte ni parte en nuestro proceso electoral, a decir que no fue transparente?

5. Acompañaron el proceso electoral unas 150 personas, entre ellas 14 comisiones electorales de 8 países; 2 misiones técnicas electorales; 18 periodistas de distintas partes del mundo; 1 Europarlamentario y 1 delegación técnico-electoral de la Central Electoral de Rusia.

Para nosotros los venezolanos es muy importante aclarar la diferencia entre la observación y el acompañamiento electoral internacional. Somos una Nación soberana, por tal motivo, en lugar de la observación, contamos con la figura del acompañamiento que permite que quienes nos visiten puedan presenciar de manera imparcial e independiente la fortaleza y la transparencia de nuestros procesos electorales en el marco del respeto a los principios de soberanía, autodeterminación y no injerencia.

En todo caso, preguntamos a los gobiernos que se reunieron en Perú, utilizando sus propios argumentos ¿qué tan legítimas han sido entonces las elecciones en EEUU, Colombia, Chile, Argentina y Brasil que jamás han recibido misiones de observación electoral internacional ni del Centro Carter, ni de la Comunidad Europea?

6. El presidente Maduro fue electo con el mismo sistema automatizado y con los procedimientos empleados en las elecciones parlamentarias de diciembre de 2015, en las cuales resultó ganadora la oposición venezolana.

No solo es el mejor y más transparente sistema electoral del mundo, dicho por el Centro Carter, sino que el proceso ha sido avalado, de manera soberana y democrática por todas las organizaciones políticas que participaron en la contienda.

Con el propósito de disminuir los niveles de ignorancia de los gobiernos del “Grupo de Lima”, les hacemos saber que una de las principales características del sistema electoral venezolano es que está automatizado. Garantiza el principio de “un elector, un voto” debido a que solo puede ser activada la máquina de votación una sola vez y con la huella dactilar del elector. También garantiza el principio del secreto del voto.

Estas garantías son previamente chequeadas y certificadas por todas las organizaciones políticas participantes en la contienda mediante auditorías previas, durante y posteriores al proceso electoral.

Para el conocimiento de todos ustedes, y con el propósito de que para próximas ocasiones puedan representar de manera más seria a sus pueblos, les informamos que en el marco de las elecciones del 20 de mayo de 2018, se realizaron 18 auditorías al sistema automatizado. Los representantes del candidato Henri Falcón, no solo participaron en las 18, sino que suscribieron las actas (que reposan en el CNE) en las que manifiestan su conformidad con el sistema. Los representantes del candidato Maduro, hicieron lo propio en las 18 auditorías, igualmente los del candidato Bertucci que participaron en 17, y los de Quijada que asistieron a 6. Por cierto, las auditorías son públicas y televisadas en vivo por el canal del Consejo Nacional Electoral.

Las auditorías realizadas fueron las de: Entrega de Base de Datos y Presentación Software para la Selección de Electoras y Electores que prestarán el Servicio Electoral; Registro Electoral; Cuadernos de Votación para las Embajadas de la República Bolivariana de Venezuela; Cuadernos de Votación Impresos; Software de Maquina de Votación; Datos Electorales; Producción de Máquinas de votación; Selección de Muestra de Máquinas de Votación para la Auditoría Pre-Despacho y Auditoría de Producción de Máquinas de Votación; Software de Totalización; Selección de Muestra de Máquinas de Votación para la Auditoría Pre-Despacho y Auditoría de Producción de Máquinas de Votación; la Plataforma Tecnológica Electoral; Cierre de Predespacho; la Red de Transmisión de Resultados Electorales; Puesta Cero de los Centros Nacionales de Totalización; Verificación Ciudadana Fase I; Verificación Ciudadana Fase II; Datos Electorales Fase II.

¿A cuáles garantías y estándares internacionales se refieren estos gobiernos? ¿Es que acaso se atreverían a afirmar que sus sistemas electorales son más transparentes y seguros que el venezolano? ¿Cuál de estos países que se cartelizaron en Lima puede darse el lujo de decir que cuenta con un sistema seguro, confiable, transparente y blindado como el venezolano?

¿En Venezuela se auditan hasta los cuadernos de votación, a diferencia de Colombia en donde de manera “improvisada” se fotocopian las papeletas de votación?[3]

Más responsables y serios deberían ser ante la comunidad internacional. Como mínimo deberían sustentar y demostrar cada afirmación que hacen en sus comunicados.

Al pretender, con actitud injerencista, desconocer el período presidencial de Nicolás Maduro, los gobiernos cartelizados en Lima irrespetan la voluntad de 9.389.056 venezolanos que democráticamente acudimos a votar el 20 de mayo de 2018.

El 10 de enero de este año, tal como establece la Constitución, el presidente Maduro, con la legitimidad que le dio la mayoría del pueblo venezolano, como debe ser en democracia, tomará posesión del cargo mediante juramento ante el Tribunal Supremo de Justicia e iniciará un nuevo período presidencial de 6 años.

Venezuela es una Nación libre, independiente y soberana. Es el pueblo, y solo el pueblo, el que constitucional y democráticamente legitima a su Presidente.

[1] https://www.gob.pe/institucion/rree/noticias/24270-declaracion-del-grupo-de-lima

[2] https://www.clarin.com/mundo/vota-poca-gente-eeuu_0_BJJz-yYee.html

[3] https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-43365200

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