Presentación De David Nieves
Hoy, Venezuela está transitando momentos estelares, donde todo está cambiando, donde a la muerte de lo viejo surge lo nuevo, tanto en lo político como en lo económico, social y cultural. A la insurrección civil de 1989 conocida por todos como «El Caracazo”, y al intento de golpe militar del 4 de febrero de 1992, se le fue sumando el despertar del ideario patriótico creado por Simón Bolívar, Libertador de Venezuela y de otras 5 naciones; por su maestro Simón Rodríguez y por Ezequiel Zamora, el General de hombres libres, que junto a otros grandes héroes supieron con su espada y su talento, dar a conocer a las mayorías el papel que la historia les había asignado.
Eso mismo intentamos dar a entender muchos de nosotros, pero tal vez con un perfil errado. Quisimos explicar el pensamiento marxista, mal leído o mal entendido, partiendo de una lectura superflua, aislada y egoísta. Comenzamos donde se resaltaba lo autónomo e independiente. Quisimos dirigirnos al colectivo siendo incomprensibles. Hoy las cosas cambian -hecho natural de la dialéctica marxista y este proceso revolucionario trabaja todas sus horas para erradicar el viejo modelo capitalista burgués de explotación y dominación, pero al mismo tiempo aparece lo que el Presidente Chávez ha dado en llamar un nuevo modelo endógeno, que nace de nosotros mismos, que proviene de los saberes populares y que insurge contra todo el sistema de explotación y dominación hegemónica imperialista.
De allí es que parte la necesidad de construir un proyecto socioeconómico capaz de darle una nueva dimensión al derecho a la vida, a la justicia económica y social, de tal forma que para vivir en un mundo mejor logremos proporcionarnos de los recursos naturales necesarios respetando la madre tierra (la Pacha Mama), y al mismo tiempo agreguemos una nueva dimensión a las comunidades organizadas, dándoles un sentido de unidad verdaderamente colectivo, que pasemos a lo cualitativo, donde no solamente nos hagamos las preguntas de: ¿Qué sientes?, ¿Qué te duele?, o ¿Tienes hambre? Sino que acto seguido y al mismo tiempo, nos sentemos colectivamente a discutir y a construir las soluciones compartidas a cada uno de los problemas sociales que aquejan al pueblo.
Se trata de crear otra relación entre los seres humanos, una relación entre iguales. Somos iguales ante la vida, ante la ley; tus derechos son mis derechos y tus deberes son mis deberes; nos separa solo tu capacidad y la del otro; tú eres médico, el otro obrero, pero somos iguales y como tal nos tratamos y convivimos.
Las misiones sociales son, por ejemplo, la base a través de la cual se dio comienzo a las propuestas de gran impacto revolucionario que fueron arrojando resultados inmediatos. Se han ido mejorando y perfeccionando hasta convertirse en un verdadero impacto social. Con esta política de crear y mejorar las misiones se plantea la gran tarea de hacer conciencia para que la gente no piense con el estómago, lo que pusimos a prueba con la criminal huelga petrolera, y la vencimos. Este proceso avanza vertiginosamente y no por la vía del empirismo, sino con el aporte que hacen millones de hombres y mujeres que, sin proponerse un protagonismo individual, somos la expresión de otros y otras, del verdadero protagonismo; nos referimos el colectivo, que surge en cualquier lugar y en el momento menos esperado.
En la IV República muestra democracia era de élites, donde gobernaba solo una minoría valiéndose de miles de triquiñuelas; para despecho de ellos las cosas cambiaron, y muy afortunadamente los pobres son ahora la mayoría que gobierna, y es hoy al pueblo a quien le ha tocado este proceso de cambio social y de procura de sustitución del capitalismo salvaje.
En esta oportunidad, expreso mi más profundo respeto por quienes se atreven a hacer este aporte, modesto y sencillo pero de gran significación, la ocurrencia de un glosario, de una recopilación de ideas y conceptos para la comprensión y para la investigación, que servirá de lectura y consulta obligada a nuestros dirigentes populares, a quienes antes eran dueños de un obligado silencio, y hoy son alborozados y entusiastas defensores de nuestra revolución, a quienes de ser los que se paraban en las aceras a aplaudir a los soldados triunfadores, hoy son ellos mismos, los mestizos, los mulatos y descalzados; los triunfantes del presente, que reciben los aplausos, por ser ellos los victoriosos constructores de un ansiado futuro socialista.
Si algo hemos aprendido en lo que va de revolución es a incentivar la formación ideológica, falta mucho aun pero estamos avanzando a paso de vencedores; los miles de periódicos locales, de emisoras y televisoras comunitarias y alternativas, y tantas iniciativas más de origen popular, así como una nueva dimensión y orientación dirigida a los canales del Estado, nos han ido dotando no solo de los mecanismos para enfrentar la infame guerra mediática, sino para debatir y exponer el pensamiento, como parte de la batalla de las ideas.
Contamos hoy con las novedosas Líneas Generales del Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2007-2013 “Proyecto Nacional Simón Bolívar”, que como primer Plan Socialista propuesto por nuestro Presidente Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, Comandante Hugo Rafael Chávez Frías, nos orienta hacia la construcción del Socialismo del Siglo XXI en los siete lineamientos estratégicos o directrices planteadas: La Nueva Ética Socialista; La Suprema Felicidad Social; Democracia Protagónica y Revolucionaria; Modelo Productivo Socialista; Nueva Geopolítica Nacional; Venezuela: Potencia Energética Mundial; Nueva Geopolítica Internacional. Que sirva este proyecto como referencia a la nueva etapa que nos espera, y a su alrededor se multipliquen los cuadros de nuestra necesaria revolución socialista a realizar sus aportes para asegurar su éxito total.
Expreso las más sinceras felicitaciones a mis camaradas Víctor Barráez y Roso Grimau, amigos y autores de este innovador proyecto de consulta.
Su pana de siempre: DAVID NIEVES B.
*Presentación del libro “Terminología del Poder popular”, compilado por Víctor Barráez y Roso Grimau, Ediciones de la Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela, 2010.