Hay una esperanza, después de esta pandemia mundial, la humanidad y la relación entre los seres humanos será diferente; reinará la convivencia, la paz, la fraternidad y surgirán: los gobiernos neoliberales y los Estados rectores del capitalismo mundial experimentaran el rigor de las luchas de los pueblos y la humanidad sobrevivirá, más solidaria y unida, sin duda.
Ciertamente, nuestra esperanza tiene por contexto la geopolítica mundial; y esa categoría llamada capital, categoría histórica, social, política y contradictoria, que desde su nacimiento en Europa, hace 8 siglos y en su evolución describe un recorrido de acumulación, concentración y centralización de capitales, cuyo desenlace es la desaceleración del PIB a nivel global, durante las décadas del siglo XXI
Hace un poco más de 100 años, un líder proletario de pensamiento y acción profunda, V. Lenin, en un libro «El imperialismo, fase superior del capitalismo» según Néstor Kohan, «Desde 1915, Lenin elabora 15 cuadernos donde trata 148 libros, (106 en alemán, 23 en francés, 17 en inglés y dos traducidos al ruso); 232 artículos (206 en alemán, 3 en francés y 13 en inglés) de 49 publicaciones periódicas. Esos trabajos pulidos y tan citados en el laboratorio mental de Lenin que hablan a las clases de la sociedad con la que trabajaba e investigaba…tan distante de la frivolidad pos moderna y la retórica vacía y superficial del post estructuralismo contemporáneo…”. En ese material monumental, prácticamente inabarcable deben destacarse como mínimo 4 obras, 3 libros y un artículo: John A. Hudson: Estudios del imperialismo de f1902; Rudolf Hilderfind: El capital financiero de 1909; Rosa de Luxemburgo: La acumulación del capital de 1912 y el artículo prologado por Lenin de Nicolai Bujarin: La economía mundial y el imperialismo de diciembre de 1915.
En su libro, Lenin define cinco rasgos centrales del imperialismo:
- La concentración de la producción y del capital determina la creación de los monopolios
- La fusión del capital bancario con el industrial Y la creación sobre la base de este capital la oligarquía financiera;
- La exportación de capitales a diferencia de la exportación de mercancías, adquiere una importancia particularmente grande;
- La formación de asociaciones internacionales monopolistas de capitales, las cuales se reparten el mundo; y
- El reparto territorial del mundo entre las potencias capitalistas más importantes.
Estas son las definiciones fundamentales de Lenin del imperialismo, del capitalismo de su época, que aún subsisten hoy, en el siglo XXI: en la situación de su crisis histórica estructural y de su expresión máxima, el imperialismo yankee.
¿Cómo quedará la situación después del COVID-19?
Lenin siempre advierte que la mera crisis económica objetiva no desembocaría automáticamente en una revolución social.
Ello implica, estudiar los diversos aspectos de la totalidad dialéctica, de la realidad histórica concreta, totalmente compleja y exigente en este siglo XXI, y sobre todo, requiere caracterizar el momento presente, el carácter concreto de la verdad del mundo de hoy.