Según la ONG Oxfam, en la región MENA (Medio Oriente-Norte de África), el 76% de los ingresos está en manos de solo el 10% de la población, y 37 milmillonarios tienen tanta riqueza como la mitad más pobre de la población adulta.
La fortuna de las 21 personas más ricas de Oriente Medio y África del Norte ha aumentado en casi diez mil millones de dólares desde marzo, casi el doble de los fondos estimados necesarios para reconstruir Beirut después de la explosión, según indica Oxfam el jueves en un comunicado de prensa.
Para la ONG, la pandemia del coronavirus ha acentuado las desigualdades en la región y 45 millones de personas podrían caer en la pobreza.
Desde el inicio de la pandemia en marzo, “los 21 hombres más ricos de la región de Oriente Medio y África del Norte [MENA] han visto aumentar sus fortunas en casi diez mil millones de dólares”, ha estimado Oxfam.
Esta suma representa “casi cinco veces los fondos requeridos por el llamamiento humanitario de la ONU para combatir el COVID-19 en la región MENA”, ha señalado la organización.
“La pandemia ha puesto al descubierto las profundas desigualdades y los fracasos masivos de nuestros sistemas económicos, dejando a millones de personas de la región sin trabajo, sin acceso a la atención médica y sin seguridad social”, ha declarado Nabil Abdo, asesor principal de Oxfam en la zona MENA.
La ONG ha pedido a los gobiernos de la región que “actúen con rapidez y aumenten las cantidades destinadas a proteger a las personas más vulnerables de la sociedad”.
También ha comparado esos diez mil millones de dólares, según datos de la revista Forbes, con los destrozos causados por la mortífera explosión en el puerto de Beirut el 4 de agosto.
Esto es “casi el doble de la suma estimada necesaria para reconstruir la devastada capital del Líbano”, agrega el comunicado, refiriéndose a estimaciones de la firma auditora PwC después de la explosión que destruyó decenas de edificios y dejó otros 3.400 edificios inhabitables.
En total, 40.000 edificios se vieron afectados.
1,7 millones de personas perderán su empleo
La explosión, que según las autoridades se debió a una enorme reserva de nitrato de amonio almacenado en el puerto, provocó más de 180 muertes, 6.500 personas heridas y destruyó o dañó las viviendas de unas 300.000 personas.
Según la ONU, más del 55% de la población libanesa está ahora “atrapada en la pobreza “.
En la región MENA, el 76% de los ingresos está en manos de sólo el 10% de la población “con 37 multimillonarios que poseen tanta riqueza como la mitad más pobre de la población adulta”, detalla Oxfam.
Para la ONG, “si Jordania, Líbano, Egipto y Marruecos hubieran aplicado un impuesto sobre el patrimonio del 2% a partir de 2010, estos países podrían haber recaudado 38 mil millones de dólares en ingresos fiscales, que podrían haberse invertido en mejorar la atención de la salud pública y reconstruir los sistemas de protección social”.
“Las medidas para proteger a las personas pobres han fracasado. Se estima que solo el 11% de los planes de recuperación económica en la región estaban destinados a medidas de protección social y salud. En este contexto, se estima que el 89% de los 16 millones de trabajadoras y trabajadores informales de la región se han visto gravemente afectados por las medidas contra la pandemia. Las inversiones extranjeras también probablemente disminuirán un 45% y se espera que 1,7 millones de personas pierdan su empleo, incluidas 700.000 mujeres, lo que costará 42.000 millones de dólares en salarios perdidos ”, añade la ONG.