Ecuador es un ejemplo, si lo hay, de que el neoliberalismo está inhabilitado para asegurar estabilidad política, social y económica y en particular a las naciones de América Latina.
El FMI y las grandes corporaciones transnacionales son el gobierno real, que el pueblo ecuatoriano no votó pero que botará, destituyendo a los títeres Lenin Moreno y Jaime Nebot, a los ejecutores del paquetazo neoliberal:
- Aumento de la gasolina y diesel
- Rebaja de salarios a las trabajadoras y trabajadores del sector público en un 20%.
- Reducción de las vacaciones de 30 a 15 días para empleados públicos.
- Aporte de un día de salario a las arcas del Estado.
- Achicamiento del tamaño del Estado, echando a la calle 23.000 trabajadores del sector público.
- Reducción y supresión de impuestos a los importadores y grandes capitales.
- Compromiso de perdonar la deuda contraída de los grandes capitales con el Estado.
- Reapertura de la base militar norteamericana de Manta en la provincia de Manabí después de 11 años de expulsión del territorio ecuatoriano, así como el ofrecimiento de la islas Galápagos para la renovación de la base naval abandonada por los EEUU desde 1946.
- Decreto del estado de excepción
- Decreto de toque de queda de 8pm a 5am.
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), las organizaciones sindicales y estudiantes, los Colectivos de Mujeres y Organizaciones Sociales, han desencadenado una fuerte resistencia al despropósito del desgobierno de Lenin Moreno y a su brutal y criminal represión.
Y el bloque de presidentes empresarios (Macri, Bolsonaro, Vizcarra, Duque, y Piñera) se aventuran a defender y apoyar las ya fracasadas políticas económicas de corte neoliberal,
La resistencia del pueblo ecuatoriano, acorrala al traidor que pone las ruedas en polvorosa: el culillo es libre y Moreno ya no es más que desgobierno portátil, ambulante, sostenido por la oligarquía y su aparato militar y policial.
Al Igual que el “Caracazo” que enfrenta el paquetazo de Carlos Andrés Pérez y da origen a la Revolución Bolivariana: el pueblo de Eloy Alfaro derrota el desvarío neoliberal: el destino inmediato de la banda de Moreno está decidido en el espejo de un Macri que ya no es más presidente:
La onda anti neoliberal, democrática y revolucionaria que avanza relanza el proyecto latinoamericano democrático, de justicia y de paz. Y el combate por el socialismo.
Venceremos.
