El 1° de mayo de 2019, vamos a conmemorar el 133° Aniversario de los sucesos ocurridos en 1886 en la ciudad de Chicago EEUUU, cuando un número importante de trabajador@s, iniciaron una protesta exigiendo mejores condiciones de trabajo y salario.

Esta jornada de protesta, culminó, el 4 de mayo, con el aniquilamiento físico, a través de la horca, de l@s promotores de las acciones, que se caracterizó, por asambleas en los portones de las fábricas, toma de las instalaciones por trabajador@s, entrega de volantes y la exigencia de reunión con los dueños de las fábricas.

Estos criminales hechos, en los que la barbarie y el odio de clase se expresó, abiertamente por los capitalistas, permitió, que la clase obrera mundial, levantara esa Bandera del 1° de mayo, convirtiéndola años después en la conmemoración y recordatorio de la memoria de los mártires de Chicago, conduciendo al proletariado mundial consciente, a hacer suya la consigna, que, 40 años atrás, Carlos Marx y Federico Engels estamparan en el Manifiesto Comunista PROLETARIOS DEL MUNDO UNÍOS.

Es evidente, que a luz de la Historia la naturaleza del Capitalismo es la opresión, la explotación, la barbarie y el exterminio político, físico e ideológico como mecanismo de defensa para preservar sus intereses.

Este 1° de mayo de 2019 se conmemorará en medio de unas circunstancias sumamente interesantes para el movimiento proletario mundial.

En primer lugar podemos afirmar que las condiciones geopolíticas existentes en el mundo de hoy le son adversas al modelo capitalista. En 1917 luego de la Revolución de Octubre que condujo al surgimiento de la URSS; los países capitalistas poseían control político y militar de la sociedad existente. El proletariado mundial, aún era muy débil en su lucha por cristalizar su programa de lucha aprobado en 1848 con la publicación del Manifiesto Comunista.

En segundo lugar luego de segunda Guerra Mundial el planeta quedó dividido en dos amplios poderes. El Capitalista y el Socialista en construcción. El proletariado mundial había logrado avanzar en su objetivo de hacer realidad el programa de la clase obrera sustentado en el manifiesto comunista, acumulando una importante fuerza en los territorios que para el momento abrazaba el modelo socialista por ejemplo la República Popular China, la consolidación de la URSS y el surgimiento de un movimiento de liberación mundial contra el capitalismo.

En tercer lugar al desaparecer la URSS en 1990, el capitalismo enarboló la tesis del mundo unipolar y el fin de la historia, intentando confundir al mundo anunciando la derrota definitiva del modelo y la ideología comunista. Obviaban deliberadamente el creciente descontento mundial contra el capitalismo y el fortalecimiento de los movimientos antiimperialistas que luchaban la multipolaridad y un nuevo orden económico. No obstante el proletariado mundial aún no concebía la profunda crisis que el capitalismo venía padeciendo desde que sufrieron la avergonzante derrota de Vietnam.

En los tres casos anteriores, el modelo capitalista mantenía un importante control político y militar en el planeta.

2019 nos indica que luego de 29 años de haber anunciado el fin de la historia, la ofensiva del movimiento antiimperialista, la consolidación de la RPCH y Federación Rusa, junto a la India, Irán, Turquía, la firmeza de Revolución Cubana, el fortalecimiento de la Revolución Bolivariana, la Revolución Plurinacional de Bolivia y la Sandinista, la victoria de López Obrador en México y el creciente movimiento antiimperialista Latinoamericano  y Europeo avizoran una profundización de la crisis capitalista y su modelo económico.

El 1° de mayo de 2019, afirmamos que, se ha visibilizado con mayor fuerza en el seno del proletariado mundial, la existencia de la contradicción imperio-nación y capital-trabajo.

El asedio y agresión de los gobiernos de EEUU contra la Revolución Bolivariana, la participación directa y pública del presidente Trump indica que el imperio necesita que su interlocutor principal asuma la dirección de la guerra contra nuestra Revolución es decir, el imperio y Trump contra la Revolución Bolivariana y Nicolás Maduro Moros.

El 20 de agosto de 2018 el Presidente Nicolás Maduro Moros anunció una reconversión monetaria y se fundamentó en tres aspectos: la defensa del salario, la recuperación del trabajo como fuente de prosperidad y contra el modelo capitalista, estos elementos colocan a la Revolución Bolivariana junto al programa de lucha de la Clase Obrera Mundial.

El programa de Recuperación económica, crecimiento y prosperidad es la propuesta que sirve de antesala al Plan de la Patria 2019 – 2025 y en el cual se establecen 11 líneas de trabajo cuyo objetivo es sentar las bases que contribuyan a consolidar la construcción del nuevo modelo económico Bolivariano.

8 meses después, el capitalismo y sus aliados persisten en su ataque a nuestra moneda pulverizando el salario y atacando nuestra economía. Es la respuesta del enemigo de clase del proletariado frente al gobierno revolucionario, dirigido por un Obrero, y al pueblo venezolano por su voluntad de mantener la Independencia y la Soberanía, pasos previos para construir el Socialismo Bolivariano.

El contexto en el cual conmemoramos el 133 Aniversario del 1° de mayo, es alentador para el proletariado mundial. El capitalismo en su desespero por evitar el derrumbe y pérdida de poder del $ viene intentando por diversas vías acabar con la Revolución Bolivariana  estrategia que le ha resultado infructuosa, a pesar de los mecanismos utilizados y que ha encontrado en el pueblo venezolano, en la clase obrera y en su Presidente Nicolás Maduro Moros un muro indestructible que ha superado todos los obstáculos.

En la República Bolivariana de Venezuela, podemos afirmar con humildad y con convicción que estamos librando una batalla fundamental que agudiza y profundiza la crisis del capitalismo y su desaparición de la faz del planeta. En América, continuamos, cavando la tumba del modelo capitalista.