Sandro Mezzadra y Brett Neilson
La extracción, las finanzas y la logística proporcionan las vías estratégicos de análisis para desenterrar lógicas y tendencias clave que de otro modo quedarían ocultas en los debates sobre el capital y el capitalismo contemporáneos. En este sentido, son sectores más que importantes a través de los cuales se puede observar la dinámica emergente que está configurando la actual transición capitalista y su desigual alcance mundial. Muchos análisis que hacen referencia al concepto de neoliberalismo en un sentido genérico… sin hacer realmente un balance de las transformaciones subyacentes del capitalismo que tratamos de poner de relieve, centrándonos en la extracción, las finanzas y la logística. Es crucial para nuestro análisis, el concepto de operaciones del capital, que llama la atención tanto sobre los aspectos materiales de la intervención del capital en situaciones específicas como sobre su articulación más amplia en patrones sistémicos.
La necesidad de avanzar hacia ese análisis se hace especialmente urgente en el contexto de la crisis de 2007-8. Si bien la hegemonía de las doctrinas económicas neoliberales ha sido definitivamente cuestionada (y en algunos casos incluso destrozada) por el turbulento ritmo de la crisis, las tendencias que analizamos no han hecho más que afianzarse…
El análisis de los procesos de financiarización proporciona una vía privilegiada para comprender los nuevos elementos y mutaciones de los regímenes capitalistas de acumulación, distribución, explotación y extracción. Más allá de las descripciones de las tendencias y tecnologías del mercado financiero, existe la tendencia continua y violenta de las finanzas a penetrar y subsumir la actividad económica y la vida social en su conjunto. El desarrollo de la crisis y su gestión no han hecho más que afianzar esta tendencia. La financiarización ha producido, pero también se enfrenta a un nuevo paisaje, lo que hace necesario repensar los argumentos sobre la globalización, la relevancia del territorio y el espacio, el papel del Estado, las estructuras de gobierno y los ordenamientos jurídicos, y la relación del capital con el trabajo y la cooperación social.
…En la medida en que la financiarización excede los límites de un «sector» económico específico, la extracción y la logística no pueden limitarse a ámbitos de actividad limitados. Como hemos argumentado en otras partes, la extracción y la logística son cruciales para el funcionamiento del mundo capitalista contemporáneo debido a su amplio alcance global, su racionalidad subyacente y su capacidad para perturbar y fabricar violentamente el espacio, los territorios y las vidas. La extracción se refiere literalmente a la eliminación forzada de materias primas y formas de vida de la superficie terrestre, las profundidades y la biosfera. Aunque estas actividades no son en absoluto históricamente nuevas, han alcanzado niveles críticos y sin precedentes, ya que la prisa por convertir materiales, tanto orgánicos como inorgánicos en valor, se ha intensificado con la expansión de las poblaciones, las nuevas tecnologías y los horizontes verdes del capitalismo.
…La logística, por el contrario, es el arte y la ciencia de organizar la rotación del capital para maximizar la eficiencia del transporte, la comunicación, la vinculación y la distribución.
Aunque la coordinación de los procesos productivos y distributivos siempre ha sido una característica del capitalismo, el desarrollo de cadenas y redes mundiales de producción y montaje ha desdibujado las líneas entre la producción y la distribución mediante el movimiento de componentes, personas y conocimientos a través de sitios mundiales heterogéneos… La habilitación de esos procesos logísticos mediante instalaciones e intervenciones infraestructurales, tanto en el ámbito del hardware como del software, ha surgido como un área vital de la actividad capitalista con capacidad para configurar el futuro económico y social… Es fácil ver que la extracción y la logística están mutuamente implicadas. Asimismo, su entrelazamiento con los mercados financieros y los procesos de financiarización es fácilmente observable. Basta pensar en cómo la manipulación financiera de los precios de los productos básicos influye en el funcionamiento de la extracción, ya sea a través de la apertura de cicatrices en la superficie terrestre para extraer minerales valiosos o a través de los elaborados sistemas de comercio de emisiones que tienen como objetivo reducir al mínimo la producción de dióxido de carbono en la atmósfera terrestre.
En cuanto a la logística, podemos ver la expansión de la aplicación de su racionalidad en el sector financiero, en particular a través de las variedades de software y el esqueleto infraestructural de la fibra, los servidores y las pantallas que sustentan la última ola de comercio de alta frecuencia. Al mismo tiempo, los mundos logísticos están profundamente impregnados por la lógica de las finanzas, evidente por ejemplo en la forma en que la indexación y el precio al contado de las rutas de los contenedores influyen en las decisiones sobre el dónde y el porqué del transporte mundial. Rápidamente se hace evidente que se puede avanzar en el análisis del capitalismo contemporáneo privilegiando las operaciones de extracción o de logística de la misma manera que los argumentos sobre la financiarización hacen hincapié en las operaciones de las finanzas. En América Latina el concepto de «neoextractivismo» ha proporcionado una lente crítica a través de la cual se pueden ver transformaciones más amplias del capitalismo…
Del mismo modo, la logística ha entrado en el vocabulario de la teoría crítica para centrar la atención en las sofisticadas tecnologías de coordinación y distribución que son aspectos cruciales del capitalismo contemporáneo…
..,la extracción, la logística y las finanzas proporcionan puntos de entrada para renovar el debate sobre las formas cambiantes de la economía y la sociedad bajo la globalización capitalista. Sin duda, estas no son las únicas palancas analíticas posibles que pueden aplicarse a la situación actual. Ha habido múltiples intentos de identificar dominios sectoriales o fracciones de capital similares para motivar y guiar la investigación de la cambiante lógica sistémica del capitalismo. Hace más de un decenio, Beverly Silver (2003) señaló una serie de «industrias» emergentes que prometían proporcionar un «ciclo de productos» destacado tras el declive de la prominencia mundial de la producción de automóviles: la industria de los semiconductores, los servicios a los productores, la industria de la educación y los servicios personales.
… Lo que pretendemos sacar de un análisis de la extracción, las finanzas y la logística no es sólo una comprensión del funcionamiento de «sectores» o ciclos económicos cruciales…queremos arrojar luz sobre los principios o lógicas que cada vez desempeñan un papel más importante en el impulso del desarrollo de otros sectores.. En este sentido, nuestra perspectiva se acerca bastante al reciente trabajo de Saskia Sassen (2014). «¿Hay algunas lógicas», se pregunta Sassen, «que impulsan lo que en la superficie se hace presente como mundos enormemente diversos: el mundo de la fractura, el mundo de las finanzas, el mundo de la logística para la externalización?» (220).
Estamos convencidos de que tales lógicas existen y que vale la pena no sólo definirlas conceptualmente sino también cartografiar empíricamente… Esto está definitivamente conectado con el funcionamiento de las «expulsiones», para recordar el título del libro de Sassen (2014), pero también requiere la destilación de nuevas formas y códigos de «incorporación» …Para entender y estas nuevas formas de incorporación es necesario alejarse de una comprensión normativa y periódica de la inclusión como rasgo característico del estado social keynesiano… la comprensión de la inclusión como un bien social sin ambigüedades oculta importantes tendencias que ya eran evidentes en la era keynesiana pero que se han acentuado mucho más bajo el neoliberalismo y la globalización. La violencia no se limita a la exclusión y la expulsión, sino que está arraigada en patrones y procesos que diferencian y jerarquizan las formas en que los sujetos se incluyen en los espacios de ciudadanía, mercados laborales y cooperación social.
…La actual expansión de las fronteras del capital toca continuamente estas tumultuosas tensiones de inclusión y exclusión… las tensiones entre la «expulsión» y la «incorporación» están siempre en juego en la expansión sistémica del capital. Sin embargo, lo que más cuenta hoy en día no es la alternativa binaria, el «uno o el otro», entre «expulsión o incorporación», sino la fusión y la contaminación que caracterizan su despliegue en la producción de nuevos códigos sociales y políticos, así como las formas de subjetividad relacionadas….
Una importante herramienta conceptual para este análisis es la noción de operaciones de capital. El ritmo de apertura y cierre, de inclusión y exclusión, que configura el encuentro del capital con un conjunto heterogéneo de formaciones sociales y espaciales, hace evidente las dinámicas de desposesión, explotación y acumulación… nos interesa aquí es cómo las técnicas y tecnologías altamente sofisticadas de conocimiento y calibración inciden en la relación social del capital que sigue dominando las formas contemporáneas de vida y cooperación… La operación… es un momento de conexión y captura que exhibe la materialidad de incluso las formas más etéreas de capital.
Esto nos da una nueva vía para acercarnos a los procesos contemporáneos de abstracción, así como al nexo global del precio y a la continua implicación mutua -tan eficazmente analizada por Marx (1971: 253)- del «trabajo abstracto» y el dinero en el mercado mundial. El concepto de operación nos permite ver las dimensiones «extractivas» de las finanzas y la logística, así como las condiciones calculadas e inmateriales de la extracción…
..La creciente sofisticación de la extracción de datos y las técnicas de intercambio de datos… van de la mano de la continua multiplicación de zonas y territorios espaciales que organizan fuerzas de trabajo que pueden enfrentarse entre sí, incluso cuando se ven obligadas a cooperar. Estas dinámicas requieren la invención de nuevas estrategias de lucha… La utilización del concepto de operaciones del capital abre también un nuevo ángulo para el análisis crítico de la relación entre el capital y el capitalismo. Una operación siempre se refiere a actores capitalistas específicos, pero también se inscribe en una red más amplia de operaciones y relaciones que involucran a otros actores, procesos y estructuras. Esto nos da dos vías analíticas a través de las cuales examinar el trabajo realizado por una operación. La primera, con su referencia a actores capitalistas específicos, revela el funcionamiento del capital en configuraciones materiales particulares, arrojando luz sobre los procesos de valorización, así como sobre las fricciones y tensiones que los cruzan en circunstancias vividas y fundamentadas.
El segundo, se centra en la articulación de las operaciones en formaciones más grandes y cambiantes que comprenden el capitalismo en su conjunto. En este último punto de vista, siguen siendo pertinentes las cuestiones de descripción sociológica, ideología, el papel del Estado y otros organismos de poder y gobierno, e incluso la dinámica cultural de la hegemonía. Sin embargo…introduce otras dimensiones y líneas de investigación…
La forma en que el capital y el capitalismo chocan con el suelo tiene profundas implicaciones para ambas vías analíticas abiertas por el concepto de operación. A través de nuestro análisis de la extracción, las finanzas y la logística pretendemos destacar un conjunto de operaciones que desempeñan un papel cada vez más relevante en la composición del capital contemporáneo y en el funcionamiento desigual del capitalismo a escala mundial… La logística y las finanzas en particular están impulsadas y producen fantasías de suavizar el mundo eliminando la fricción y la resistencia. La absoluta soberanía del capital que proyectan es quizás la más tenaz e hiperbólica de estas fantasías… En las formas más recientes de «minería de datos», ya sea asociada a los medios de comunicación social o a las aplicaciones industriales e incluso militares, vemos procesos de extracción que tienen como objetivo anticipar comportamientos y tendencias y así lograr una integración perfecta del presente con el futuro.
Mirar críticamente la extracción, la logística y las finanzas a través del ángulo de sus operaciones nos permite ver no sólo las formas en que son susceptibles a diversos procesos de fricción y lubricación, sino también la desigualdad de su distribución y funcionamiento a través de las escalas y fronteras heterogéneas del espacio y el tiempo globales. No cabe duda de que existen zonas, núcleos, regiones e incluso espacios continentales en los que la intensidad de estas operaciones se concentra de manera particular y estratégica. Los centros logísticos, los enclaves de extracción y los recintos financieros de las ciudades mundiales son sólo algunos ejemplos de esas formaciones espaciales.
Asimismo, hay sitios e incluso vastas extensiones territoriales donde el alcance de estas operaciones es débil o está implícito sólo a través del control a distancia. Navegar por esta geometría variable es esencial para las investigaciones tanto conceptuales como empíricas de la extracción, la logística y las finanzas.
El alcance global de las operaciones de extracción, logística y finanzas no puede pensarse sin prestar atención a los patrones desiguales y heterogéneos que crean en circunstancias materiales específicas. No se trata de afirmar un predicamento mundial de caos y desorden, sino de proporcionar un marco analítico y político dentro del cual establecer parámetros para observar las lógicas y los impulsores de los procesos y transiciones mundiales actuales. Ya sea mediante una investigación de operaciones específicas del capital o un examen y seguimiento más amplios de su articulación en redes y formaciones complejas del capitalismo, se trata de aislar un conjunto de características y problemas que se manifiestan en los diversos dominios y paisajes atravesados por los procesos de valorización del capitalismo.
Ese aislamiento no puede llevarse a cabo sin un enfoque simultáneo de los límites de esos procesos, que marcan la imposibilidad de que el capital se afirme como una totalidad autosuficiente al mismo tiempo que producen una configuración desequilibrada de fuerzas. Una vez realizado este análisis, podemos empezar a preguntarnos cómo el capital y el capitalismo remodelan su relación con la política. Esto significa tanto investigar los papeles cambiantes de los Estados y otros organismos de gobierno como poner de relieve las formas heterogéneas en que las luchas de los sujetos explotados desafían y superan las formaciones emergentes de gobierno y capital en muchas partes del mundo.
